Amor de Huerta es fruta y verdura, pero es mucho, muchísimo más que eso. Es sudor, tesón y la voluntad férrea de Bea, la hortelana que dejó atrás la luz del mediterráneo para cultivar una tierra que da tomates y fresas que maduran despacio hasta finales del verano y que tienen nombre de aristócrata francesa, Mara du Bois y saben a gloria.
Cultivan fruta y verdura ecológica con métodos basados en el respeto al medioambiente y la utilización eficiente de los recursos naturales. Tanto en la elección de las semillas, la lucha contra las plagas como el abonado y el riego piensan formato eco. Para que los tomates sepan a tomate y a nada más. Se arreglan con aceite de oliva y sal.
Para que nuestros campos sigan creciendo las amapolas, las abejas conquisten sus castillos de cera y que la palabra cáncer no enrte por tu boca directa al estómago. SIN PESTICIDAS. Y CON MUCHO AMOR.